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Es lo mismo, ¿no?

Sobre el síndrome de abstinencia y sus derivados
Experiencia universal, aumenta tu flujo sanguíneo, se incrementa el flujo de hormonas por todo tu cuerpo, los procesos hormonales se desorganizan y reorganizan, es intenso; tu actividad cerebral se altera, todo tu sistema nervioso se altera.
Sientes placer y, como sería de esperarse, te apegas al objeto de placer; es altamente adictivo.

Experiencia química que cuando entra en el organismo, tiene efectos sobre ti e involucra la modificación de tu conciencia, estado de ánimo, procesos de pensamiento. Cuando permanece por largos períodos de tiempo puede generar incluso alteraciones en tus funciones corporales.

Puede ser estimulante, acelerar y aumentar la actividad funcional de cerebro.  
El área cerebral se encuentra bastante alterada, se liberan altos niveles de dopamina; tienes una sensación constante de bienestar, estás eufórico, aumenta tu energía, estás alerta, atento, despierto, ansioso, obsesivo.
Llega a tener efectos negativos sobre ti, pero lo sigues consumiendo; eres adicto.

¿Podrá ser detectado en mi cuerpo con pruebas luego de un tiempo de ser consumido?
Puede ser depresor, suprime la acción del sistema nervioso central, algunas veces. Disminuye la actividad corporal. El aumento de dopamina llega a producir insomnio.
Llega a Inhibir el efecto excitador de neurotransmisores, por lo que logra a tener un efecto sedante; influye en la toma de decisiones y en el control de impulsos, llega a afectar hasta tu memoria.
Su efecto disminuye y cada vez necesitas más; ya lo estás tolerando.

Incluso me atrevo a decir que puede ser alucinógeno, ¿por qué no?, causa alteraciones en nuestra percepción de la realidad, produce delirios y estados de confusión.
Necesitas consumirlo para llevar tu vida por un camino normal, su ausencia te provoca dolor y depresión; eres dependiente, a lo mejor padeces del síndrome de abstinencia.

Síndrome que llega a producirte temblores, insomnio, sudoración, náuseas ansiedad, delirio, lagrimeo.
Puede hacerte sentir irritable, cansado, sin apetito, depresivo, enlentecido, hipersomnia, apático.

Tremendo síndrome de abstinencia.

Hiperactividad, fatigabilidad, dolores de cabeza.
¿Llegará a debilitar tu voluntad y tus relaciones personales?
¿Llegarías a involucrarte en inmensos conflictos?, ¿destinarías todos tus recursos para conseguirlo?, ¿matarías?


Si son todos estos los efectos que llega a tener sobre ti, ¿podrías entonces reemplazar el amor con: anfetaminas, cocaína, cafeína, morfina, nicotina, benzodiacepinas, alcohol, marihuana, LSD, éxtasis y/o tolueno? Es lo mismo, ¿no?

-Laura Pongutá
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