___________________________________________________________________________________________
Ciento sesenta y dos fotos del Viejo Buenos Aires. imágenes simples a las que el tiempo se encargó de darles importancia. Como una tarde en las carreras de caballos o las lavanderas en el Río de la Plata.
Las fotos viejas de las ciudades nos dan la posibilidad de trasladarnos en el tiempo y de vivir, aunque sea por un momento, en una cotidianidad imaginaria de lugares familiares.
Este no es un libro con aroma a melancolía, muy por el contrario, queremos contagiar la alegría que da descubrir ciertos secretos que embellecen nuestra vida en la Ciudad.
Las fotos viejas de las ciudades nos dan la posibilidad de trasladarnos en el tiempo y de vivir, aunque sea por un momento, en una cotidianidad imaginaria de lugares familiares.
Este no es un libro con aroma a melancolía, muy por el contrario, queremos contagiar la alegría que da descubrir ciertos secretos que embellecen nuestra vida en la Ciudad.
___________________________________________________________________________________________