Acompañado de su mandolina, el profesor Humberto Virgüez, músico, psicólogo y especialista en Musicoterapia acompaña a los pacientes de la unidad de cuidados intensivos (UCI) durante las intervenciones del personal médico, ayudando a que la experiencia sea menos traumática.
Las actividades de musicoterapia, que desde hace algunos años se han implementado en el Hospital Universitario Nacional (HUN) de la UNAL, buscan liberar la mente tanto de los pacientes como de sus familiares y del personal médico, ya que en estos espacios se viven elevadas tensiones emocionales generadas por accidentes o enfermedades, entre ellas el COVID-19.
“La musicoterapia ha evidenciado respuestas realmente positivas –e incluso conmovedoras– en los pacientes, pues muchos de ellos se sienten más tranquilos durante las intervenciones de los médicos cuando está presente el musicoterapeuta, quien logra regular su estado de ánimo con la interpretación musical”. Así lo resalta la doctora Alejandra Peláez, fonoaudióloga de la UCI del HUN.
“El proyecto empezó en 2018, a cargo del doctor Jairo Pérez, quien buscaba en un principio incluir la música –y en general las artes– en la política de humanización en salud en la UCI del Hospital”, señala el profesor Virgüez.
Las sesiones, programadas los viernes de cada semana, cuentan además con espacios de divulgación cultural por medio de códigos QR ubicados en distintos lugares del HUN con contenidos sonoros cambiantes, como música y podcast.
“Estamos desarrollando actividades de musicoterapia para disminuir el estrés tanto de los trabajadores de la salud en la UCI como de los pacientes y las familias en la sala de espera. Las condiciones de estos espacios mejoran con la música, mediante estrategias que han demostrado su efectividad”, menciona el especialista.
